Camping pequeño y muy acogedor. Los servicios increíblemente limpios, son un poco antiguos pero ideales para darte una ducha calentita. Los propietarios encantadores. Igual llegas y no hay nadie en recepción, pero puedes elegir parcela y ya pasarán para hacer el check-in. También tienen un pequeño bar para desayunar, comer o cenar. Hemos estado 2 noches con la furgo y los perros y genial!!